PENSAMIENTOS INTRUSIVOS

Amenazas y terror me persiguen siempre, suelo tener problemas para dormir y muchas veces sufro parálisis del sueño, pero no había vuelto a ocurrir. Anoche me desperté en mitad de la noche tiritando y congelado. Si intentaba moverme, oía un zumbido muy fuerte en ambos oídos y se hacía más fuerte cada vez que me movía. Estaba aterrorizado y recordaba el refrán: "tener miedo es de prudentes, saberlo vencer, es de valientes". Tenía miedo de abrir los ojos y sentía la presencia de alguien en la habitación, mi habitación no está completamente oscura porque dejo una pequeña luz azul. Abrí los ojos y vi una figura oscura, de colores, muy alta, gibosa, con cuernos enormes y los ojos ensangrentados. Estaba en la esquina de mi habitación y me miraba fijamente. Entré en pánico, intenté moverme, pero mis ojos se humedecían. Cerré los ojos, pensé "no tengo a nadie que me proteja". De repente, escuché la voz del maligno que me decía: "Ya nadie podrá ayudarte". Perdí el conocimiento, no recuerdo nada.

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