divagaciones

Un pedazo de pan, un décimo, algo de caldo, unas mentiras, el cariño, más mentiras, la ilusión que desilusiona, una amistad, un bocadillo de esperanza, un abrazo tardío, nostalgia, luces del más allá, la vía Infinita, un camino, miles de cuerpos flotando en la indiferencia, otros poblando el fondo de los océanos, promesas vanas, un hogar, las lágrimas negras, la paciencia infinita, el amor, el desengaño, la ternura, la falta de todo, el consumo y la alegría comparti da, a veces forzada, el mañana, el 'porqué', empieza una nueva vida, más promesas, gente que pasa sin pena ni gloria, unas monedas, puedes venir a verme, mañana será otro día, no tengo suerte, no puedo soportar más esta vida, dame calor, deja de maltratarme, soy libre, tendrás que hacer lo que yo diga, niños sentaos a la mesa, mamá no hay nada, pues un bocadillo de votos, ¿por qué yo no?, no puedo caminar, ni puedo rendirme, piensa en el próximo año, todo irá mejor, dame calor, otro desastre del más allá, no importa

Éste fue uno de los primeros pasos que di en la escena teatral. Aquellos genes, los ha heredado mi querida hija  Laura . Juventud, divino tesoro. Teatro María Guerrero Obra de Teatro El Pájaro Azul de Maurice Maeterlinck. Versión de Ricardo López Aranda. La obra se estrenó el 26 de noviembre de 1967 en el Teatro María Guerrero. Con dirección de Ángel Fdez. Montesinos. Reparto por orden de aparición en escena: Padre Tyl ... ... ... ... ... ... José Luis Lespe Madre Tyl ... ... ... ... ... ... Angela María Torres Myl ... ... ... ... ... ... ... ... ... Selica Torcal Tyl ... ... ... ... ... ... ... ... .... Manuel Galiana Agatha ... ... ... ... ... ... .... Conchita Goyanes Tiempo ... ... ... ... ... ... ... Pedro Valentín Hada ... ... ... ... ... ... ... ... Paloma Pages Perro ... ... ... ... ... ... ... ... Emiliano Redondo Gata ... ... ... ... ... ... ... .... M.a Paz Ballesteros Pan ... ... ... ... ... ... ... ..... Venancio Muro Hora ... ... ... ... ... ... ... ... Carmen

Abrir un libro,  música de fondo o simplemente silencio la primera página empezar a oler, sentir ver pasar las palabras escuchar, la trama el paso del tiempo el relato, su estructura nuevamente sentir pasa el tiempo ... inexorablemente, pasa el tiempo ....

Los sigo esperando puntualmente desde que era niño. Sigo poniendo, en compañía de mis padres, ese cuenco con agua, los polvorones, el mazapán y aquel Licor 43, o Calisay por si alguno de ellos necesitaba un pequeño empuje para seguir cabalgando por el ancho mundo. Esa estrella era mejor que el GPS, no fallaba. Allí estaban puntualmente y quedaba demostrado cuando me despertaba temprano por la mañana, con los pelos de punta y esa sonrisa que no se debe perder.  Allí estaré el 6 de Enero, después de haberme acostado temprano, no sea que me vean levantado y me quede con el carbón, o algo parecido. Mi favorito era el Rey Baltasar que, según creo, venía de Egipto. Siempre dejaba unas líneas escritas en las que destacaba mi admiración por ese Rey; claro está, con diplomacia, no fuera que se sintieran mal los otros dos. No os preocupéis, no os he traicionado con Papá Noel. Sigo siendo fiel.

De repente me vi aturdido por un murmullo, disparo de palabras apenas perceptibles, directamente a mi oído. Fueron en aumento, algo inesperado, una rueda de palabras soeces, malsonantes, pretendiendo causarme un dolor insoportable. Como si fuera un sueño, venían envueltas en nubes de algodón ennegrecido por la insidia, la traición y la mentira. Fue el final de una buena amistad. Alea Iacta est.

Sonidos del silencio llegan a mis oídos cansados de tanto ruido mediático, infernal. Sonidos del silencio con una melodía suave, silenciosa, llena de esperanza, vida y solidaridad. Sonidos del silencio roto por la barbarie, intentan equilibrar mis sentidos, regresar al principio de todo lo que supone calma, sosiego, vida. Sonidos del silencio, gritando a voces, alzando la voz.

Rabelais se fue en busca del gran quizás, antes de morir. Yo estoy en busca del gran "porqué" en vida. ¿Por qué pasa esto, lo otro, o lo de más allá?. Me prometieron un rayo de sol cuando era niño, un arco iris lleno de bondad y esperanza, un mundo solidario. ¿Por qué ese empeño en romper los sueños de la infancia cuando somos adultos? Qué torpeza, qué insidia, cuánta maldad. Algún día mi "porqué" se convertirá en un "quizás" y encontraré, por fin, un rayo de esperanza al final del arco iris y un mundo más solidario.

Cómo puedo vivir sin amar Cómo puedo vivir sin sonreir Fruto amargo de mis desengaños Frescas flores de mis juveniles años Buscando mi daño, cruel amor De paciencia lleno estoy Soledad amena e incierta.

Era su primer día. No sabía que ponerse. Por fin,  se puso ese vestido que causaría sensación. Zapatos, vaya problema. Peinado, ni te cuento. Maquillaje con más glamour, tono acorde con su pelo. Ni joyas, ni aderezos. Lo más natural posible. No pasaría desapercibida, sería la sensación, miradas por todas partes. Su primera fiesta, guateque, sus dieciochos años. Ya arreglada. Con mucha paciencia pudo sentarse en su silla de ruedas. Su mejor amiga vendría a buscarla.

Qué bonito saber que existes que estás ahí en cualquier parte mientras quede un hálito de vida extenderé mi mano y te tocaré mi voz podrá llegar a tus oídos cuán breve el placer que siento aunque sea de pensamiento.

Estoy en el invierno de mi vida. Calma, sosiego y esa tranquilidad que la experiencia nos da. Otoño de la vida que pasó, primavera para qué hablar. Qué daría porque este invierno fuera eterno, pasar sin ansias ni vértigo, huyendo de un pasado. Viajar, viajar, como un ave rozar las cumbres, como si fuera una vela a merced del viento. Reclinar mi cabeza en tu regazo, sentir como ese sueño va cerrando mis párpados ya cansados. Soñar, soñar, beso perfumado. No despertar, eternamente quedarme allí. Reposar. Soñar. Imaginar. Soñar.

Me gusta el olor de la ternura El sabor de la amistad La mirada de la inocencia El ruido del pentagrama Y un toque de solidaridad.

Quizás fui ladrón de tus momentos a lo mejor títere de tu vida puede que acompañante fiel o quizás fui un fiel amigo. Gota a gota y día a día pudimos construir algo aún quedan los rescoldos en algún rincón de la memoria.

Ambiente rural, campo, pueblo Buscar cobijo, árbol, tierra, agua Bebida para refrescarse y pan horneado Descanso obligado, vuelta a los orígenes. Ida y vuelta.

Duro es el camino, el camino elegido Riesgo a perder el tiempo y los amigos Debería escuchar, confiar en mi instinto Y dejar de adivinar el pensamiento De nuevo equivocado, de nuevo traicionado El círculo vicioso continúa otra vez. ¡Qué difícil es volver a retomar el camino!

Callada, silenciosa, soportando frío, calor, miradas. Esa compostura, gallardía, cuerpo plastificado.  Ponte lo que te venga en gana. Altiva, corazón frío, amante ocasional de mirada furtiva. Ese armazón tuyo con forma humana. Mi querida maniquí, espabila, sal a conocer mundo, aunque casi te recomendaría seguir con tu rutina con esa mirada tuya perdida observando cómo pasa la vida. Un cariñoso saludo de todo corazón mi adorada maniquí.

Tus ojos como fuego abrasador Una ardiente exhalación Con una paciencia infinita Yo rendido y convencido Tú triunfante y convencida Cupido está en guerra Yo quieto a la expectativa Tus besos bálsamo reparador.