AMOR A TUTIPLEN

Era un jovenzuelo enamoradizo cuando se enamoró de una jovenzuela asturiana de nombre Amor y apellido Amado. Fue en verano en un pueblo de la montaña de León. El amor corría por sus venas y, según confesaba Amor, también a ella. Cuánto amor, Amor, pleno de cariño, se sentía muy 'amado'. Era un sentimiento recíproco, mutuo, intenso, su nombre y apellido además de su dulzura y alegría hacían que se sintiera feliz. Pudo ser un amor pasional, Eros, lúdico u obsesivo, o quizás fuera un amor de estío. Misivas, cartas, postales, juventud, lozanía, frescura, ese amor de Amor y el suyo se fue enfriando. Otro verano, papá, mamá, cuando nos vamos, no hijo, este año vamos a la playa. Bajón. Quizás el dicho: 'siembras la distancia y cosechas el olvido' fue la razón de que ese amor fuera perdiendo fuerza. Fue un amor sincero Amor Amado, aunque fuera un amor efímero. Amor a raudales, un bonito y amoroso recuerdo.

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